La epilepsia no distingue género y puede desarrollarse a cualquier edad, incluso durante la infancia. Se trata de una enfermedad cerebral no contagiosa pero crónica, que padecen una de cada 100 personas. Por ello, es importante hablar y "educar" sobre esta patología para saber cómo actuar frente a un paciente que presenta una crisis.

La hiperexcitabilidad del cerebro que afecta a las personas con epilepsia se traduce en una descarga anormal y excesiva, cuya característica principal son las convulsiones recurrentes.

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"Una de cada 10 personas presenta una crisis alguna vez en la vida", remarcó la doctora Vanesa Roig, médica neuróloga del equipo de INEBA (MN: 140.522). Si bien la cifra es preocupante, la profesional aclaró que "la mayoría de estas personas, un 70 por ciento, tienen una buena respuesta al tratamiento, logran controlar las crisis y su calidad de vida no se ve afectada".

Entonces, el otro desafío que plantea esta enfermedad es reducir la estigmatización asociada con la epilepsia, "ya que puede llevar a la discriminación y a la exclusión social".

“Una de las razones por las que existe estigma en la epilepsia es la falta de comprensión y conocimiento sobre la enfermedad. Muchas personas no saben cómo reaccionar cuando alguien tiene una convulsión, y pueden pensar que la epilepsia es contagiosa o que se trata de una enfermedad mental”, explicó la Dra. Roig.

El diagnóstico de esta patología es clínico. Lo realiza el médico en la consulta y se apoya en

estudios complementarios como la resonancia del cerebro y el electroencefalograma.

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Para los casos de epilepsias refractarias, que son las que no responden a las medicaciones

habituales, Roig indicó que se usa el cannabis medicinal como medicación anticrisis y que tiene una buena respuesta en personas con síndromes específicos como Síndrome de Dravet o Síndrome de Lennox Gestaut.

Qué hacer frente a un paciente con una crisis de epilepsia

Lo más importante ante una crisis de epilepsia es mantener la calma. Los episodios suelen durar de uno a tres minutos.

●     Recueste a la persona en el piso con cuidado.

●     Retire los objetos duros o filosos que puedan lastimarla.

●     Gire suavemente a la persona hacia un lado. Esto la ayudará a respirar.

●     Ponga la cabeza de la persona sobre algo suave y blando, como una campera doblada.

●     Si tiene algo apretado a nivel del cuello, como un pañuelo o una corbata, aflójelo.

●     Controle el tiempo. Si dura más de 5 minutos llame al 107.

●     Acompañe a la persona hasta que recupere la consciencia.

Para solicitar un turno o realizar una consulta con los profesionales, comunicarse al (011) 4867-7700 o en la web de INEBA

Fuente Ineba